DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER Y LA NIÑA EN LA CIENCIA

La ciencia y tecnología de Córdoba estrecha lazos por la equidad de género

El CONICET Córdoba participó recientemente en una actividad interinstitucional para consensuar metas de igualdad y diversidad en el sector de ciencia y tecnología. Carlos Vittar, profesional del CONICET y coordinador de la iniciativa, reflexiona sobre sus potencialidades y desafíos.


Mónica Balzarini, directora del CCT CONICET Córdoba, coordinó la mesa de Ciencia y Tecnología en el evento Protagonistas 2024.
El evento Protagonistas 2024 fue organizado por el "Eje 2: Equidad y Géneros" de la ADEC.

Este año se cumple el décimo aniversario de la declaración del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. La efeméride, celebrada cada 11 de febrero, fue creada por la Asamblea General de las Naciones Unidas con el objetivo de promover mayor participación y protagonismo de las mujeres en la ciencia e inspirar vocaciones científicas en las niñas. De acuerdo con la ONU, la diversidad de talentos y la equidad de género en la investigación científica son fundamentales para abordar los grandes retos globales de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

En ese sentido, se requiere que las instituciones y actores del ecosistema de ciencia y tecnología implementen políticas y acciones que promuevan la inclusión, la diversidad y la equidad. A nivel local, cabe destacar el evento “Protagonistas 2024" organizado por la Agencia para el Desarrollo Económico de la Ciudad de Córdoba (ADEC) para fomentar el desarrollo inclusivo de mujeres y diversidades. En dicha edición, participaron activamente alrededor de doscientas personas de los sectores de salud, deporte, medios de comunicación, científico-académico, sindical, productivo, vecinal y político.

La jornada contó por primera vez con una actividad de vinculación, basada en el trabajo de diez mesas que debatieron sobre las fortalezas y dificultades para afianzar el rol de las mujeres y diversidades en diferentes ámbitos sociales. Esta propuesta innovadora fue coordinada por Carlos Vittar, profesional del CONICET en el Centro de Investigaciones y Estudios sobre Sociedad y Cultura (CIECS, CONICET-UNC) e integrante del Eje 2: Equidad y Géneros de ADEC.

En particular, la labor de la Mesa de Ciencia y Tecnología fue facilitada por la directora del Centro Científico Tecnológico CONICET Córdoba, Mónica Balzarini. Allí, junto a representantes del INTA, la Universidad Nacional de Córdoba, el gobierno de la provincia de Córdoba y la Cámara de Industrias Informáticas, Electrónicas y de Comunicaciones del Centro de Argentina (CIIECCA), se discutieron y consensuaron los siguientes propósitos para mejorar la equidad de género en el sector:

1) Crear políticas de género que atiendan a la transferencia de ciencia y tecnología como un componente fundamental del desarrollo nacional; 2) promover la equidad en los sistemas de educación y mejorar el entendimiento de los procesos científicos en la necesidad del pensamiento crítico; 3) generar políticas educativas que mejoren la formación en habilidades y vocaciones para equiparar la brecha tecnológica existente entre los géneros desde las infancias; 4) reducir las brechas de género en la promoción de las carreras científicas y el acceso a financiamiento para Ciencia, Tecnología e Innovación; 5) fomentar la participación de mujeres y diversidades en empresas y servicios basados en conocimiento científico-tecnológico, y su acceso a cargos jerárquicos de toma de decisiones; y 6) llamar a los gobiernos y a otros actores sociales a proteger al ecosistema científico y su diversidad.

Estos propósitos, así como los que generaron las demás mesas sectoriales, forman parte de una Declaración que fue entregada a funcionarios del gobierno municipal y provincial a modo de insumo para las políticas y el debate público. “La idea original era que los propósitos fueran más concretos, aunque finalmente fueron redactados de forma más general y transversal. Sobre todo en el caso de la mesa de Ciencia y Tecnología. Ahora estamos pensando en la posibilidad de retomar este material en una actividad a medio camino entre la jornada del año pasado y la edición 2025, y relevar entre los actores sociales buenas prácticas y programas que estén desarrollando en línea con los objetivos acordados”, explica Vittar.

Espacios intersectoriales e intergeneracionales para motorizar el cambio

Para Vittar, los aportes científicos en materia de género tienen un mayor impacto cuando intervienen en diálogos intersectoriales más amplios: “El hecho de que la ADEC sea una organización civil integrada y apoyada por el sector gubernamental hizo que esta jornada tuviese mayor potencial. Lo más rico fue la diversidad de sectores sociales que participaron, intercambiando desde muy distintos intereses, experiencias y escalas. Esto hubiese sido más difícil de lograr en un evento organizado por la academia”.

La vinculación tecnológica y la articulación interinstitucional son herramientas claves para generar una necesaria retroalimentación entre la ciencia y otros ámbitos de la sociedad, en pos de la inclusión y la igualdad. “Lo que promueve la ADEC es el trabajo en equipo y el enriquecimiento mutuo. Esto se refleja en el modo en que las instituciones que integran el Eje 2 colaboraron para concebir una actividad tan interesante desde el punto de vista de la economía feminista y el sentido pragmático”, destaca Vittar.

Según el especialista, a partir del trabajo de relevamiento previo y de los propósitos acordados, se observa que en el sector de Ciencia y Tecnología -y en otros como educación y salud- ya no se percibe el acceso de las mujeres y diversidades como el problema; pero sí su jerarquización y la valoración de sus contribuciones. “Se requiere un cambio cultural para que gane la diversidad. Promover modelos que rompan los estereotipos sobre quiénes hacen ciencia, en qué disciplinas y campos sociales, para asegurar la libertad de las niñeces y juventudes de seguir su vocación científica sin imposiciones”, reflexiona Vittar.

Y añade: “Lo que buscamos lograr desde el Eje 2 de ADEC es que la perspectiva de género sea un eje transversal, no sólo una temática particular de acción. Si queremos que realmente la equidad y diversidad de género estén instituidas en ciencia y técnica, es necesario que nuestra actividad de vinculación y transferencia -no sólo de investigación- contemple ese enfoque de forma integral, incluso en las áreas donde a simple vista no pareciera tener tanta relevancia”.